Moyano, Alfonsín, Daer, Ubaldini. |
No voy a analizar lo dicho por los nombrados en la ocasión pues siempre caen en frases hechas, repetidas, aburridas e insustanciales, sino que traigo aquí una parte del libro que publicara Pablo Giussani (1927-1991) reconocido escritor y periodista, de varias conversaciones que sostuvo con el entonces Presidente Raúl Alfonsín entre noviembre de 1986 y marzo de 1987 que recopiló en un libro “Porqué, Dr. Alfonsín” publicado por Sudamericana-Planeta.
Pregunta Giussani con referencia al Plan Austral: Que
reflexión puede hacer Ud. sobre la actitud general de los sindicatos frente a
esta línea de política económica?
R.A.-La actitud de la CGT ha sido
muy dura, por momentos parecida a la línea de acción desestabilizadora que
adoptó la central obrera frente al gobierno de Íllia, pero de todos modos la
sangre no ha llegado al río y en una visión de conjunto puedo decir que no hay
motivo para atribuir connotaciones “conspirativas a esta actitud de la CGT.
De cualquier manera, me parece
importante poner énfasis sobre la sustancial diferencia de filosofía que, en
esta disputa, ha separado a la CGT. del gobierno. Es la diferencia que media
entre en nominalismo salarial que domina a la central obrera y el empeño
nuestro en encarar toda política retributiva en término de salarios reales.
En mi gira por Alemania Federal
en 1975, visité Dusseldorf para saludar a los dirigentes de la central obrera
de ese país y conocer de cerca el funcionamiento de esa Organización; eran los
difíciles años de la crisis petrolera mundial, cuyos efectos ya se estaban
haciendo sentir entre los alemanes.
Yo le pregunté a los líderes
obreros si el salario real estaba cayendo como consecuencia del alza en los
precios del petróleo y que medidas habían tomado al respecto.
Mire, me dijo uno de ellos, “ en
este momento estamos recorriendo todos los sindicatos para impedirles que pidan
aumentos salariales, ya que esto podría afectar gravemente muestra
competitividad internacional y precipitar una caída de las ventas, lo que a su
vez provocaría desocupación, un flagelo que deseamos evitar.
Me llamó la atención este
criterio de globalidad económica (continúa Alfonsín) a partir del cual
encaraban los dirigentes sindicales alemanes los intereses sectoriales de sus
representados.
continuará
la foto es gentileza de
m1
0 comentarios:
Publicar un comentario