Este blog no tiene ni ahí
la trascendencia de los medios que mueven diariamente a miles de lectores; pero
entiendo que no puedo permanecer insensible ante la metamorfosis de nuestra Señora
PresidenTe, quien en un rapto de caridad humana ha dicho "Lo que quiero es
que no peleemos, que nos entendamos. Ahí está la clave. Algunos quieren que nos
peleemos y no les voy a dar el gusto. Nos vamos a entender los argentinos de
una vez por todas"
"El odio nos
convierte en personas feas, que tal vez sufran sin darse cuenta; no se puede
vivir en el odio"
“Una de las claves de la
derrota de los pueblos es insuflarle pesimismo y “No hay libertad sin amor al
prójimo”
Aquí hago una pausa, por
qué sabido es que todos los extremos son malos, pero lo hago para adherir a lo
dicho por la Sra. mandamás.
Eso sí, me sentaré a
esperar ver a Mauricio Macri junto a la
PresidenTe arreglando temas de interés común, hablando de manera civilizada de
quienes no piensan como ella, recibiendo con una sonrisa a Héctor Magnetto y
los periodistas de Clarín, dándole oxígeno a su ex-amigo Daniel Scioli,
haciéndole ver a sus falderos (Moreno,Boudou, , doña Hebe, etc. etc. mencionando solo a tres por razones de espacio) que
mentir es malo, muy malo.
Y finalmente a ella
cumpliendo y haciendo cumplir los deberes que le marca la Constitución
Nacional.
Tal vez por aquello que
alguna vez, dicen, dijo el apóstol Tomás: Si no lo veo, no lo creo.
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