La noticia (tomada del diario italiano La Gazzetta dello Sport) dice que María Belén Rodríguez Cozzani, argentina de nacimiento pero radicada en Italia, es un peligro público para los automovilistas de Milán que diariamente circulan por la avenida Buenos Aires en el cruce con vía Palazzi.
Allí mismo como se aprecia en la siguiente imagen, hay un maxi-poster publicitario de la bella Belén y pese a los esfuerzos de los conductores de prestar atención al tránsito intenso de Milano no pueden evitar dar una “miradita” a las bellas curvas de Belén que desde lo alto altera el largo trayecto de esa avenida con nombre argentino que conecta con los principales shoppings de la ciudad.
Por decisión de la policía municipal como consecuencia de una carta presentada por una comisión de vecinos (comadres diría Fabrizio De André) el sugestivo cartel deberá ser retirado por “presunta indecencia” además de representar un posible peligro para la seguridad vial, a más tardar este lunes 15, a pesar que la medida tiene muchos detractores que preferirían seguir contando con la figura de Belén mostrando sus curvas desde lo alto.
La nota, sin mencionarlo, sugiere que tanto hombres como mujeres “solo piensan en eso” y vaya si será cierto, que como botón de muestra muchos se preguntan porque la misa criolla en el Vaticano fue cantada por Patricia Sosa y no por Jairo o Abel Pintos, digo, no sé, pregunto.
En el siguiente video se aprecia como Belén despierta intensas pasiones en el sexo opuesto, claro que en este caso un grupo de indígenas viene a romper lo que parecía una ser una fiesta visual para los dos supuestas víctimas de “arenas movedizas” ocultas bajo un lecho de agua.
A Tarzán con bananas verdes. ¡
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