La
noticia dice que “El candidato a presidente del Frente de Todos, ( y Todas?)
Alberto Fernández, encabezó el miércoles pasado (31/7) un acto con científicos
y su discurso incluyó la mención a una investigadora del Conicet
que firmó la solicitada en apoyo a Mauricio Macri y que días atrás dijo haber
recibido insultos por haber hecho pública su adhesión a la fórmula de
Juntos por el Cambio.
Fernández
continuó diciendo: "Esta mañana cuando leía en Twitter a Sandra,
a quien no tengo el gusto de conocer, decía 'qué equivocada está'. Claro, ella
no debe saber lo que me marcó La Noche de los Bastones Largos. Yo no pego ni
con bastones ni con decretos ni con nada a nadie y menos a los que investigan.
Así que Sandra, sacate ese miedo, es un miedo incomprensible".
Todo
bien míster Fernández, solo que hay un dato que no me cierra: Ud. declara haber
nacido un dos de abril de 1959 y su forma de referirse a la nefasta noche “de
los bastones largos” bajo el gobierno del dictador Juan Carlos Onganía ocurrió
un 29 de julio de 1966, es decir cuando Ud. solo contaba con siete añitos, edad
que obviamente no le permitía ser alumno universitario. Claro Ud. alegará que
lo marcó el cruce de los Andes del General San Martin y tampoco era
contemporáneo, pero en campaña confundir a la gente es muy recurrente de los
políticos que no tienen un mensaje claro.
"A
ningún investigador nunca le voy a preguntar cómo piensa ni a quién vota —dijo
Fernández—. Así que, Sandra
Pitta, no tengas miedo, te prometo que te voy a cuidar como a todos ellos,
porque vos valés mucho igual que todos ellos".
Si
continuaba con el tema seguro se atrevería a decirle a la señora Sandra, que la
llevaría a pasear con Dylan, e irían juntos a ver los partidos del Bicho de la
Paternal (Argentinos Juniors), cuando aún solo es un precandidato a la
Presidencia para estar en condiciones de hacer ese tipo de promesas ( excluyo
otras más graves, como aumentos salariales imposibles, medicamentos gratis,
desdolarización de las tarifas, ect. etc;) tampoco el haber empujado a un
borrachito en un bar te da chapa de guapo.
Ni la
cara ni la voz de ayudan Albertito.
Fuente:Infobae