Estos diez consejos de Stevens fueron publicados por una revista argentina de gran circulación en marzo de 1946 y los encontré dentro de la colección “Nuestro Siglo” y de inmediato pensé que en virtud de las variantes que indefectiblemente se producirán con la promulgación de la nueva ley de matrimonio homosexual, les serian de utilidad a muchas personas, por lo cual y adecuándolos un poco a la actual realidad, los detallo a continuación:
1) No cedas ante una lágrima, porque luego tendrás que ceder ante una orden.
2) No acostumbres a tu novio/novia los regalos, que te quiera por ti y no por interés.
3) Discute con él/ella sin acalorarte por que si te exaltas y dices una palabra fuera de lugar, después tendrás que pedir disculpas.
4) No beses a tu novio/novia. Todo lo más en la mano. Que sepa que concedes importancia a eso, que puede ser el principio de tu debilidad.
5) No vayas a menudo a ver a tu novio/novia. Un hartazgo de visitas puede traer como consecuencia el aburrimiento. Y cuando este empieza, comienzan a surgir los defectos.
6) No prometas ser una pareja modelo. Nadie es capaz de serlo y si faltas a tu promesa, sufrirás las consecuencias.
7) No pienses que el teléfono de la casa y el celular de tu novio/novia es de uso exclusivo tuyo, y no entables largas charlas telefónicas. Estas son ambiente propicio para las mentiras, porque no se ven los rostros.
8) No comprometas a tu novio/novia delante de otra gente con demostraciones demasiado afectuosas. La malicia y la sospecha van muy lejos, y no podrás detenerlas aunque quieras, porque el final de su viaje es la calumnia.
9) Enseña a tu novio/novia que ha de ser tu futuro consorte, a desligarse un poco de las tonterías sentimentales y a considerar la prosa de la vida.
10) Cuida conservar tu personalidad, y si debes asumir compromisos cúmplelos. La firmeza de carácter es una de las cosas más admirables.
Solo resta ponerle un moñito.
Chau,
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