Cuando el pasado diciembre de 2010, Julio César Falcioni fue presentado en Boca dijo que venía a dirigir " junto con mi cuerpo técnico a esta gran institución (no al equipo) agregando que "si los jugadores están bien seguramente los resultados los vamos a obtener"
Con lo cual el hombre quedó a cubierto de cualquier contingencia como la de ayer donde Godoy Cruz de Mendoza en la propia bombonera le encajó cuatro pepinos, cinco en realidad si contamos el anulado por el atento (‘) juez de línea, ese que en el primer tiempo se ubicaba del lado derecho del televisor. Claro, justo ése.
Bien, Falcioni como ya se dijo manifestó que venía a tratar de ayudar, de colaborar y de ponerlos (a los jugadores) bien físicamente, no prometiendo nada más que trabajo.
Cumplió. Trabajar sin dudas a trabajado, pero parece que los jugadores aún, todavía, quizá, tal vez, a lo mejor, quien sabe, NO ESTAN BIEN.
Sabido es que soy hincha de Boca, pero no tan fana como para no admitir que Godoy Cruz, fue mejor, que Boca tuvo mala suerte y que la camiseta alternativa blanca sin ninguna duda es mufa; la mayoría de las veces que el equipo la ha usado, irremediablemente ha perdido.
Pero también se ha podido comprobar que el arquero boquense Javier Hernán García es un aficionado a los lepidópteros que son una orden de insectos apterigógenos holometábolos, cuyos imagos, vulgarmente llamados mariposas, tienen dos pares de alas membranosas cubiertas con escamitas microscópicas de diversos colores, boca con trompa chupadora o espiritrompa, arrollada en espiral bajo la cabeza cuando no la utilizan, generalmente sin mandíbulas y con enormes ojos compuestos, algo que ni por las tapas se le ocurrió pensar al entrenador de arqueros Néstor Lotártaro.
Enterado que una nube de mariposas “ Alas Iridiscente” sobrevolaba el campo de juego, Javiercito no pudo resistirse a la tentación de llevarse algunas para su colección privada con lo cual le permitió a Rubén Ramírez, autor del 20% de los dos tantos que convirtió (el 80% restante es mérito de García) realizar en dos oportunidades un ritual epiléptico de festejo (sube y baja las manos con dos dedos en punta, se toca la panza, se besa los nudillos, alza los ojos al cielo, recita algo así como una plegaria, besa de nuevo los nudillos y sonríe feliz)
Cuando un equipo del interior le gana a uno de los grandes, en este caso al que tiene el mejor diez del país (de las maravillas) al “goleador histórico” y a otros varios valores que por su cotización, ya quisiera tenerlos yo como su representante, solo el amor por los Lepidópteros puede justificar esta derrota.
Pero igual los muchachos de Godoy Cruz tuvieron un gesto digno de destacar.
Como hoy es el día de San Valentín, no quisieron estar ausentes, y como se fueron tan contentos de la Bombonera, le enviaron a Falcioni y a su equipo un ramo de la flor característica de esta celebración “la mimosa”.
No me quedó claro la leyenda de la tarjetita adjunta, decía: Feliz día de San Antonio (Tomba)
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